JUNIO: Artazul desde Ulzurrun. - Alaitz IP - Ikasnova

La última salida de la temporada 22/23, este año hemos tenido de todo (de norte a sur y de este a oeste).

En esta ocasión nos hemos reunido 28 personas para trasladarnos a las 9 de la mañana al pueblo de Ulzurrun en el portal de Alaitz, punto de partida de la excursión de hoy. Nos adentramos en un valle, de donde proviene el agua que consume la Comarca de Pamplona. En el punto de salida tenemos diferentes plazas de aparcamiento y la excursión comienza en la plaza del pueblo. Comenzamos con una pendiente que nos lleva al punto de confluencia del PR-NA-170. En la dirección del manantial de Arteta (camino señalizado con marcas amarillas y blancas para dar la vuelta al valle de Ollo), a la izquierda hay un “abrevadero” que representa a una cabra macho y el camino se abre a la derecha siguiendo el PR por la parte superior de Ulzurrun. Por pistas y caminos llegamos a “Pontarrón”, antigua canalización de agua de 1895 y 1920. En la actualidad discurre por un puente paralelo construido en 1990, año en el que se instala la tubería de canalización de agua, que llega hasta Egillor.

Seguimos sin perder demasiado tiempo por la parte superior de la carretera que conduce al nacedero de Arteta.

El manantial de Arteta es uno de los desagües más importantes del macizo kárstico de Andia. El manantial sale directamente del arranque. Arteta suministra agua potable a Pamplona y su comarca y fue la única fuente suministradora desde 1895 hasta la construcción del embalse de Eugi.

El Ayuntamiento de Pamplona adquirió el servicio en 1940. El manantial se sitúa junto a un profundo desfiladero en el que se precipitan las aguas procedentes de Goñi. Estamos en un medio natural de alto valor ecológico. En el interior de este paisaje rocoso hay una gran cantidad de agua que, a través de su manantial, aporta diariamente riqueza.

Antes del manantial hay un centro de interpretación. La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, con este centro de educación ambiental, quiere poner a nuestra disposición la oportunidad de conocer el misterioso mundo de las aguas subterráneas que se esconden detrás del manantial. Seguimos por un profundo desfiladero aguas arriba hasta llegar a la cascada de Artazul (unos 500 m). En esta ocasión el camino estaba cubierto por las aguas de cascada. Se trata de un paso sencillo, por medio de una cadena y unas escaleras de hierro, hasta la cascada. Su visión es impresionante.

Tras el descanso, tras un almuerzo y unos baños, volveremos por nuestros pasos al parking de la Natividad, incluyendo algunos deslizamientos. En esta ocasión, tomamos la carretera y regresamos al camino señalizado (tomando un camino a la derecha en el cruce) para descender hasta el puente que atraviesa el río Udabe, pasando sobre un antiguo molino. Dejamos este molino a la derecha, a menos de un km del manantial, para seguir el camino que nos conduce a las salinas de Arteta. Allí son un ejemplo de aprovechamiento respetuoso de los recursos naturales, como el de la sal. Este producto fue muy valioso durante siglos porque se utiliza como conservante de los alimentos.Las salinas son lagunas de poca profundidad que permiten evaporar el agua del manantial de agua salada cercano al manantial para obtener la sal que lleva disuelta y secarla. La visita a los saleros nos acerca a esta actividad tradicional y comunitaria.

En la actualidad existe el “pediluvio”, algunos de los cuales toman el “baño terapéutico”. Al extraer el agua salada, la piel produce estas formaciones salinas por su alto contenido en sal (con una concentración de 250 g/l). Tras este pequeño descanso, seguimos por la pista hasta llegar al pueblo de Arteta. A la salida del pueblo tomamos la NA-7030 siguiendo las marcas del PR. A unos 200 m. tomamos el cruce de la derecha, que es el punto final de la ruta actual, para enlazar con el pueblo de Ulzurrun. Los partícipes de este año tuvieron la oportunidad de disfrutar de una comida conjunta.